Ordenando el closet...

 La verdad es que cuando estamos atentos a los pequeños detalles de la vida; esos que hacen la gran diferencia...cualquier evento te motiva e inspira. 
 Hace algunos años pasaba por una de esas crisis existenciales; como todos la tenemos en cualquier etapa de nuestras vidas y,  me imaginé ordenando mi vida igual como a un closet. A medida que me lo iba imaginando, encontraba más y más serenidad. 

Quiero comentar esta metáfora personal con ustedes, porque como les he dicho, la idea de este blog es compartir vivencias, experiencias y aprendizajes con la sencilla y práctica razón de ser mejores seres.

 Ese día visualice que nuestra alma es un closet, si un closet...no arruguen la cara y abran esos ojitos! 

Un closet desordenado, en donde encontramos ropa limpia, ropa sucia, una que tenemos años que no usamos, otra que no nos sirve... y qué me dicen de la que tenemos únicamente para ocasiones especiales ( matrimonios, bautizos y funerales)?

 Si llevamos esto a la realidad de nuestra alma, de nuestro ser, a lo que somos, no hay mucha diferencia; cuántas emociones, sensaciones, cuántos sentimientos tenemos que ni siquiera sabemos que tenemos?

 Hoy les invito a ordenar el closet del alma, del espíritu... se animan?
 Supongamos que nuestras fortalezas están mezcladas con nuestras debilidades; cómo sabemos cuál usar en un momento determinado? No es mejor ordenarlas para saber como buscarlas en caso que las necesitamos?
 Ahí es cuando me refiero a limpia con sucia...(vayamos ordenando mentalmente) lo limpio para un lado y lo sucio para la cesta de ropa sucia; sabemos que esta ahí y que deberíamos lavarla para volverla a usar... igual pasa con nuestras debilidades, a medida que vamos descubríendolas, sabemos manejarlas, controlarlas e incluso convertirlas en fortalezas. 

 Está esa ropa que no usamos desde hace añooooos, esa que ni nos acordábamos que teníamos...pudiera compararse con aquellos sentimientos que tenemos años que no experimentamos, el asombro cuando alguien nos abraza; la dulzura cuando un niño nos besa tiernamente; la alegría porque vamos a ver  a ese ser especial...en fin!, a veces nos endurecemos ante el paso del tiempo y perdemos eso que llamamos esencia, y solo recordamos cuando conseguimos alguna nota en algún libro viejo de ese primer amor o alguna foto con los amigos de la infancia...

 Nos encontramos  también con esa ropa, que ya no nos sirve...porque hemos engordado, porque esta pasada de moda o porque tiene unos agujeros de tanto uso que le dimos...pudiera funcionar aquí, la similitud entre esa ropa y esos sentimientos que albergamos, como  la imprudencia, la insensatez, la inmadurez, el rencor, el resentimiento...por nombrar algunos. Seguramente, en una época nos pudo haber quedado bien, o tal vez era la moda o el momento de la vida que pasábamos que nos hacia ver bien... eramos muchachos! Pero cuando somos adultos, hombres y mujeres maduros y no me refiero a la edad, porque soy de las que piensa que la edad no da madurez... ya pues...no nos luce, no nos viste, no nos sirve y debemos simplemente deshacernos de ella para seguir avanzando o siguiendo la metáfora, darle espacio a la ropa nueva.

Y por último no menos importante, nos encontramos con esa ropa de "ocasiones especiales"; somos felices sí y solo sí....me salio el crédito; le sonreímos a la pareja sí...cerré el negocio del año; nos sentimos dichosos únicamente cuando compramos el carro nuevo...uyyyy!!!...No seria mas sabio y menos riguroso síííí!! Sonreímos más?... siendo realmente felices siempre, con la total y completa convicción que aún y cuando lo somos , tendremos nuestros momentos de tristeza o desilusión, ese nos embargará en alguna circunstancia, evento o etapa de nuestras vidas...por qué? Porque seremos felices...pero no infalibles.

Cómo vamos??!!!!! ...Seguimos???!!

 Ya tiene la ropa blanca con la blanca? es decir, el amor, la ternura, la confianza, la paz, la ilusión...juntas? sabe que ahí van? sabrá que aunque se vaya la luz es ahí donde van? sabrá llegar a ellas...no?
 Y la negra dónde la ponemos? Porque debemos estar claros, que sin una pieza de color negro tampoco podríamos tener completo el ajuar...esas serian, no se, por nombrar algunas; el temor, la desconfianza, la inseguridad, la ira...sentimientos totalmente legítimos que en ocasiones nos embargan y no nos hacen ni mejor ni peores personas...

Y...se me olvidaba la ropa de color...pudiera ser fucsia, roja para las féminas y azules, grises, (habrá algunos mas osados) para los caballeros...en esta gaveta guardaríamos??... se me ocurre... la seducción...el deseo...la pasión...sentimientos que nos hacen sentir tan plenos, realizados y... vivos!

 La metáfora del closet quiero compartirla porque como hemos podido leer, no tiene mucha diferencia con lo que somos nosotros; muchas veces nos apegamos a cosas que ya no necesitamos, otras las olvidamos... y créanme no es la idea! 

La idea desde mi juicio y sin ánimo de ofender a quien opine diferente es; que todo lo que somos debe funcionarnos para nuestro beneficio, lo que tenemos nos debe quedar ahora y ya!...con la única finalidad de ser usado en el  día a día como herramientas de logros. 

 ...Que va hacer usted con lo que le ocupa espacio??...Espacio que desperdiciamos para darle paso a lo nuevo...(experiencias, lecciones, vivencias, aprendizaje)

 Sabiendo entonces qué tenemos;  podemos andar siempre bien  y preparados, solo debemos saber combinarnos y vestirnos, según la ocasión a la que seamos invitados a lo largo de nuestra vida.

Te invito a ordenar tu closet...seguro será fascinante...anímate, y sí te atreves... compártelo!